Durante la época medieval, el Rey Alfonso X, “El Sabio”, abró una fascinante ventana filosófica y cultural al mundo del conocimiento, gracias a sus traducciones de la literatura persa, filosofía griega y medicina arábe.
Pero no todos los monarcas han sido tan receptivos a las ideas de los filósofos, por lo cual a menudo éstos fueron perseguidos por hacer público sus pensamientos. En el estudio de nuestro filósofo, se ha previsto una vía de escape: un túnel secreto que podía utilizar en caso de peligro. También se encuentran numeras obras de sabiduría, reunidas en estanterías empotradas en la pared y en la cabecera de las camas gemelas.